¿Qué es el impuesto sobre la propiedad? – Es un impuesto que se paga sobre los bienes inmuebles u otros tipos de bienes de los que seas propietario. El impuesto sobre la propiedad es un tipo de impuesto ad valorem, es decir, toma en cuenta el valor tributario de la propiedad.
Por lo general, el impuesto sobre la propiedad se basa en la ubicación y la valuación tributaria del bien. Los gobiernos estatales y locales suelen valuar y cobrar el impuesto sobre la propiedad anualmente. El impuesto puede variar de manera significativa dentro de un estado e incluso entre condados vecinos.
Lecciones clave
¿Cómo se calcula el impuesto sobre la propiedad? Para determinar el impuesto sobre la propiedad, se multiplica el valor tributario del bien por la tasa impositiva básica, que es un porcentaje establecido por la autoridad tributaria municipal. En ciertos casos, también se incluyen consideraciones especiales en el valor total de los impuestos sobre la propiedad.
¿Por qué tenemos impuestos sobre la propiedad? Los impuestos sobre la propiedad son impuestos locales que financian programas de gobierno locales y ayudan a pagar servicios y proyectos en beneficio de la comunidad.
¿Cuál es la diferencia entre los impuestos sobre la propiedad y los impuestos sobre bienes raíces? Aunque se usan indistintamente, no son lo mismo. El impuesto sobre bienes raíces es un tipo de impuesto sobre la propiedad, pero, no todos los impuestos sobre la propiedad son impuestos sobre bienes raíces. Los impuestos sobre bienes raíces imponen un impuesto sobre los bienes inmuebles, como tu vivienda, y otros impuestos sobre la propiedad, como los impuestos sobre la propiedad personal, imponen bienes tangibles y transportables que sean de tu propiedad, como vehículos.
¿Qué son los impuestos sobre la propiedad?
Impuesto sobre Bienes Inmuebles – El que algo quiere, ¡algo le cuesta! Este impuesto se hará efectivo una vez seas propietario de la vivienda. El impuesto a la propiedad de bienes inmuebles es un impuesto local que grava la posesión de un inmueble, seas o no residente en España.
- El tipo impositivo varía según la región donde se aplique, y se calcula en función del valor catastral.
- El valor catastral es el valor administrativo que se le da al inmueble, basado en el valor del suelo y de la construcción.
- Otra buena noticia: el valor catastral suele ser inferior al precio de la vivienda.
¿Quieres saber más? Consulta nuestro post sobre el IBI aquí,
¿Cuánto es el impuesto de una vivienda?
a) Impuestos en la compra de vivienda nueva: – IVA(impuesto sobre el valor añadido): cuando la vivienda se entrega por primera vez paga el IVA (actualmente en el 10%). Se entiende por «primera entrega» aquellas que se adquieren al promotor tras la construcción de la misma.
Si las viviendas han estado alquiladas tras la finalización de las obras y las compran las personas que han vivido en ellas también se considera «primera entrega» lo que pagaría el IVA. Por otro lado, si los compradores son diferentes a los arrendatarios no tienen esta consideración y pagarían viviendas de segunda mano, pagando sus impuestos correspondientes.
Pueden pagar un IVA del 10% (frente al 21% general) los edificios destinados principalmente a viviendas (edificaciones en que al menos el 50% de la superficie construida se destine a viviendas), incluidos garajes y anexos en ellos que se transmitan a la vez y siempre que el número de plazas de garaje por cada propietario no exceda de dos unidades.
10% con carácter general 4% cuando se trate de viviendas de protección oficial de régimen especial o de promoción pública
Para las compras de viviendas en territorio Canario se paga el IGIC (Impuesto General Indirecto Canario) con un tipo del 6,5% con carácter general. IAJD (Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados): este impuesto se genera por firmar en el notario e inscribirse posteriormente en el Registro.
¿Cómo se llama el impuesto que se pagan por los terrenos y casas?
El Impuesto Sobre Adquisición de Inmuebles —o Impuesto Sobre Traslación de Dominio— es un monto que paga el comprador al momento de contraer una propiedad ( casa, departamento, terreno o local), ya sea nueva o usada.